El llamado metal moderno tiene varios exponentes destacados últimamente. Uno de ellos es sin lugar a duda Oceano, que desde Estados Unidos vino a remecer las aguas con su sólida propuesta deathcore. Y aunque se demoraron siete años en sacar lo que es hoy su sexta producción, están dispuestos a dejar en claro quién rige dentro de este competitivo movimiento. Con un total de 9 temas, lanzados bajo etiqueta Sumerian Records, Oceano se la juega en marcar la diferencia con otras bandas deathcore incorporando sintetizadores, además de ritmos djent y progresivos. Eso nos exhibe una ampliación de su propuesta artística, haciendo que el álbum no caiga en la monotonía y no se enfoque sólo en lo más brutal. Los matices, sin salirse del camino de este estilo que ellos mismos contribuyeron a masificar, hacen que la placa resalte y que se hagan cortos los 32 minutos de su duración. Muy bien por Oceano.